domingo, 22 de mayo de 2011

LONDRES por Lucía García Carretero.


Un billete de avión de ida y vuelta. Seis meses de diferencia. Una maleta llena de ilusión e incertidumbre. Hoy viajamos a Londres. Visitaremos gracias a nuestro amigo Julio Delgado Álvarez, estudiante de 19 años que un buen día decidió perfeccionar su inglés, la ciudad del Támesis.

–Hola Julio, ¿qué tal la vuelta a casa?
¿La vuelta a casa?. Bien, buen recibimientodespués de unos cuantos días fuera, una buena comida y una larga sobremesa hablando un poco de todo en general.

–Seis meses sin tu familia, sin tus amigos... ¿qué tiene Londres que enamora tanto?
Supongo que es el ambiente, las calles, la cantidad de personas de diferentes países que allí conoces, la multiculturalidad y un montón más de cosas. Es una ciudad en la que tienes de todo, y puedes hacerlo todo, no tienes tiempo para aburrirte.

–Tanto tiempo en Londres te ha tenido que servir para conocer todos sus secretos. ¿Qué lugar poco conocido de la ciudad recomendarías visitar?
Me quedo con todos sus enormes parques cuando llega el buen tiempo y se llenan de gente; unos riendo, otros cantando… alguno aprovechando los primeros rayos de sol de la primavera, incluso alguno que se atreve con la guitarra. Pero como lugar perfecto para dar un paseo, elijo Greenwich, con sus Pubs, sus calles tranquilas alejadas del bullicio de la ciudad además de sus lujosas casas victorianas y su mercado.

–¿Y durante un día de ruta turística?
Comenzaría el día por la zona de Westminister, viendo el gran Big Ben y las preciosas Casas del Parlamento, la Abadía de Westminister  y el famoso London Eye; seguiría por el mercado de Camdem Town, totalmente alternativo y diferente al resto de la ciudad, o bien, si tenemos suerte y visitamos Londres un sábado, cambiaría éste por el mercado de Portobello, famoso por sus antigüedades y situado cerca de Nothing Hill, uno de los barrios más lujosos. 




A media tarde, sin duda visitaría el Museo de Historia Natural, impresionante por fuera, y más impresionante por dentro; réplicas de animales de todas las épocas y todas las partes del mundo, desde dinosaurios hasta pequeños roedores. Para terminar, un paseo por Covent Garden sería perfecto, sus Cafés al aire libre y sus artistas callejeros llenan las calles de vida.





–Conducen por la izquierda, son serios, siempre tienen prisa... Acostumbrado al carácter mediterráneo, ¿te costó mucho adaptarte a los británicos?
Si, al principio es duro; los comienzos nunca fueron fáciles. Llegas a un país nuevo, a una ciudad masificada, no conoces a nadie, tienes una cultura nueva y a todo eso le sumas el idioma; al principio todo son inconvenientes, pero poco a poco vas llegando a ese país, a esa ciudad, a ese idioma y como no… a esa gente, y te das cuenta que de verdad merece la pena, que estás ante una experiencia increíble, y que todo lo que tienes que hacer es disfrutar.

–Vale. Ya sabemos qué visitar, pero todavía no sabemos ni dónde alojarnos ni donde comer. ¿Qué nos recomiendas?
La verdad, que para alojarte hay infinidad de lugares. Cada paso que das, tienes un hotel diferente; quizá, si vas en grupo y eres aventurero, algo económico y divertido puede ser un Hostel; algo como un hotel, más pequeño, donde por un precio muy asequible puedes pasar la noche; eso sí, normalmente tienes que compartir la habitación con otras personas. De cualquier manera, es una buena opción, algo nuevo. Recomendaría Museum Hostel, mis amigos estuvieron allí y no les fue nada mal; además está situado justo detrás del Bristish Museum y cercano a una parada de metro
Para comer… no recomiendo nada; la comida inglesa pudo conmigo y terminé cansado de ella, pero en cualquiera de los típicos Pub’s ingleses te puedes hacer con un buen ‘Fish & Chips’, que consiste en un pescado rebozado al que le añaden unas patatas fritas, y si te gusta probar cosas nuevas, le puedes añadir una salsa de color marrón, con mejor sabor del que parece tener.

–¿Y para desconectar después de un largo día de turismo?
Para terminar el día la mejor opción es la zona de Piccadilly Circus y Leicester Square. Tienes muchos bares, destaco el pub O’Neills, con diferente tipos de música y en muchos de ellos puedes encontrar increíbles conciertos en directo donde puedes escuchar y cantar en vivo las mejores canciones inglesas.

Ya sabéis queridos fugitivos...

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